En el mundo en
el que vivimos se han introducido numerosos cambios e innovaciones en diversos
ámbitos (social, económico y político) debido a unos factores que actualmente
se encuentran en auge y que son las nuevas tecnologías de la información y la
comunicación, las biotecnologías y las nanotecnologías.
En lo que
respecta a la economía del conocimiento en las redes sociales, se ha
realizado reseña a un doble paradigma: el de lo inmaterial y el de las redes.
Al sustituir el trabajo humano por máquinas, ha provocado que surja una nueva
sociedad en el que el dominio de lo inmaterial provoca más ventajas
estratégicas y con más poder que el de lo material. Todo este desarrollo de lo
inmaterial provoca que podamos explorar ámbitos que antes se consideraban como
inalcanzables. Entre el proceso de mundialización y el de las mutaciones
tecnológicas destacamos la aparición de lo que se denomina sociedades en redes.
El concepto de sociedad en red es un concepto muy novedoso y que surge al
superar la noción de sociedad de la
información. Esta nueva sociedad presenta un modo de organización social
cuya estructura está construida alrededor de las redes de información a partir
de la tecnología de información microelectrónica.
La economía del conocimiento relata una
etapa particular del desarrollo del sistema capitalista, basada en el
conocimiento. Tal como Marx predijo a mediados del siglo XIX, parece ser que el
conocimiento está suplantando a la fuerza de trabajo y que la riqueza creada se
mide cada vez menos por el trabajo en su forma inmediata, insumable y
cuantificable, y depende cada vez más del nivel general de la ciencia y el
progreso de la tecnología.
La economía del
conocimiento pone de manifiesto la complementariedad estructural y tecnológica
que existe entre las nuevas posibilidades de codificación, acopio y transmisión
de la información facilitadas por las nuevas tecnologías, el capital humano de
los trabajadores que pueden utilizarlas y una organización “reactiva” de la
empresa que permite la explotación más amplia posible del potencial de
productividad.
En Europa y
EE.UU, el paso de una economía agrícola a una industrial en el s. XIX se había
caracterizado por la emigración de una gran parte de la mano de obra rural
hacia las fábricas, provocando un abandono de la agricultura y una
superpoblación de las ciudades. De este modo se produjo una coexistencia entre
diferentes sistemas tanto a nivel mundial como dentro de cada país.
Las Nuevas
Tecnologías han tenido un gran impacto en los conocimientos en redes, por lo
que podemos hablar de una evolución tecnológica, creación y circulación del
conocimiento.
Evolución
tecnológica y creación y circulación del conocimiento
El desarrollo
digital ha propiciado una expansión sin precedentes en las redes, en función de
dos ejes: uno horizontal de aceleración de las transmisiones, y otro vertical
de densificación de las conexiones. La
interactividad es una característica de estos nuevos soportes del conocimiento,
por lo que encontramos de la televisión con una interactividad de sentido
único, los teléfonos que permiten mantener a distancia un auténtico diálogo
“cara a cara” o incluso Internet. De
este modo cabe destacar que existe una influencia considerable de las nuevas
tecnologías en la creación del conocimiento, ya
que adelanta la accesibilidad y el manejo del conocimiento.
La propagación
en nuestro entorno de objetos virtuales, modificables y accesibles
infinitamente, facilita el trabajo colectivo y la adquisición de conocimientos
en común. El aprendizaje específico, como por ejemplo la escuela, se está
convirtiendo en un espacio virtual de dimensiones planetarias y accesibles a
distancia, en el que será posible simular una infinidad de situaciones. La
creación de conocimiento en redes y la aceleración del tratamiento de la
información abren nuevas posibilidades de trabajo sobre las bases de datos,
independientemente de su tamaño, uso y finalidad.
¿Cuáles son los límites de la mercantilización de los
conocimientos?
¿Hacia un
incremento de las desigualdades entre el Norte y el Sur en una economía basada
en el conocimiento?
El avance de
estas sociedades de conocimiento no provoca una igualdad entre todos los países
del mundo, por lo que podemos encontrar que los países ricos se enriquecen con
estas medidas y los pobres se quedan estancados produciéndose una época fasta
de la “nueva economía”.
¿Hacia una
obsolescencia de lo humano o hacia nuevos horizontes para la creatividad?
Cuanto más
dominamos los conocimientos, más ignorantes nos volvemos. Pero esta afirmación
no se puede tomar como cierta, sino que hay que preguntarse si esta diferencia
no entraña un riesgo de que el cerebro humano se vea superado por las máquinas
y los programas que ha creado. Es verdad que las máquinas parecen estar listas
para reemplazar al hombre, pero esto sólo es cierto cuando se trata de tareas
mecánicas.
Los
efectos cognitivos de la revolución digital y de la codificación de los
conocimientos
Las nuevas
tecnologías digitales influyen directamente en la rapidez de transmisión de la información y también en el
tratamiento y la recepción de los conocimientos. Por lo que podemos afirmar que
la digitalización ha conducido a la cumbre de las formas antiguas de
codificación del conocimiento permitiendo transformar datos en un lenguaje es
de esencia colectiva. El uso de las
tecnologías provoca una situación que antes
no existía y a la que la población debe adaptarse para avanzar.
Las nuevas tecnologías no sólo producen un
movimiento de desmaterialización.
Los aspectos más
impresionantes que podemos destacar de la revolución de la información, es la
facilidad con que conviven, en la vida cotidiana, los aparatos y los nuevos
tipos de información
Una de las
claves del éxito de las nuevas tecnologías es su ergonomía. La ergonomía es una
disciplina tecnológica que trata del diseño de lugares de trabajo, herramientas
y tareas que coinciden con las características fisiológicas, anatómicas,
psicológicas y las capacidades del trabajador. Las nociones de comodidad y
facilidad de utilización son elementos fundamentales en la concepción de los
programas que integran las tecnologías de la información. Por último debemos
tener en cuenta que los contenidos y métodos deben adaptarse a sus usuarios
reales y satisfacer sus necesidades.
¿De las sociedades de la memoria a las sociedades
del conocimiento?
Memoria y nuevas tecnologías
La
digitalización está destinada a modificar la transmisión de la tradición en la
medida en que afecta al funcionamiento de las instituciones culturales,
educativas y científicas.
¿Vamos hacia nuevos
comportamientos culturales?
Todo el mundo
participa en el desarrollo de Internet, los consumidores se convierten en
receptores, poseedores y protagonistas de la era de la información, por lo que
no son unos usuarios pasivos, sino que son activos ya que tienen la posibilidad
de participar en el proceso del perfeccionamiento de Internet.
Internet ofrece
además posibilidades inéditas de experimentación de la identidad, gracias al
establecimiento de intercambios que se establecen totalmente de forma anónima y
simultánea.
Internet pude
convertirse tanto en un instrumento de la edificación de sociedades del
conocimiento como en un laberinto que podría conducirnos, lenta, pero
seguramente, hacia esa sociedad dela diversión con todos los inconvenientes que
ello podría entrañar. Los consumidores debemos de saber hacer un uso
responsable de estas herramientas y procurar que contribuyan al desarrollo de
las sociedades del conocimiento y no a destruirlas.